COPA reconoce denuncia contra policías de Chicago por supuestas relaciones sexuales con migrante alojada en estación

Durante meses, los migrantes transportados en autobús a Chicago desde Texas se han encontrado alojados en estaciones de policía de Chicago en circunstancias difíciles, lo que dejó atónitos a los líderes de la ciudad y del estado el viernes por las denuncias de que los oficiales en una de las instalaciones policiales podrían haber tenido contacto sexual con al menos una de las que buscaban refugio allí.

Una denuncia presentada el jueves ante la Oficina Civil de Responsabilidad Policial impulsó una investigación interna del Departamento de Policía de Chicago sobre denuncias de conducta sexual inapropiada por parte de al menos un oficial que involucra a una migrante alojada en una comisaría de West Side.

En un comunicado emitido el viernes, el primer administrador adjunto de COPA, Ephraim Eaddy, dijo que la agencia alertó a los asuntos internos de CPD al recibir la denuncia contra los “miembros” del departamento.

“Si bien los investigadores de COPA actualmente están determinando si los hechos y los detalles de esta acusación están fundamentados, queremos asegurarle al público que todas las acusaciones de esta naturaleza son de la más alta prioridad y que COPA actuará rápidamente para abordar cualquier mala conducta de los involucrados”, dijo Eaddy en el comunicado.

El jueves por la noche, CPD reconoció que inició una investigación interna sobre las denuncias de que al menos un oficial tuvo una relación sexual con migrantes alojados en la estación del distrito de Ogden. Ese distrito cubre los vecindarios de La Villita y Lawndale.

La mayoría de los detalles de las acusaciones no se conocían, pero los inmigrantes que se quedaron en la estación le dijeron a un reportero del Tribune el viernes que estaban siendo reubicados.

La oficina del alcalde Brandon Johnson emitió un comunicado calificando la situación como “profundamente preocupante”.

“Los recién llegados están siendo trasladados a refugios temporales en funcionamiento actual, y la reubicación completa se completará mañana (pasado sábado) por la mañana”, se lee en un comunicado de la administración.

También se enfocó si algunos de los migrantes supuestamente involucrados en el asunto eran menores de edad, dijeron fuentes con conocimiento de la revisión interna. Un portavoz de CPD no abordó las preguntas sobre cuándo comenzó la investigación o si algún oficial fue despojado de sus poderes policiales.

La administración de Johnson confirmó ese aspecto del caso el viernes por la noche.

“La administración de Johnson sigue muy enfocada en las denuncias profundamente preocupantes de conducta sexual inapropiada por parte de un oficial del Departamento de Policía de Chicago contra un menor recién llegado, y otras denuncias de conducta sexual inapropiada en el Distrito 10 del Departamento de Policía de Chicago”, se lee en el comunicado. “Si bien este incidente está siendo investigado por la Oficina de Asuntos Internos de CPD y la Oficina Civil de Responsabilidad Policial, la Ciudad se compromete a brindar apoyo y recursos de salud mental a todos los necesitados”.

Cuando se le preguntó sobre la investigación en una conferencia de prensa no relacionada en Springfield el viernes, el gobernador J.B. Pritzker dijo que sería “horrible” si se demostrara que las acusaciones son ciertas.

También señaló que se ha sacado a más migrantes de las comisarías, “donde han estado cuidando bien a esos migrantes”, y se les ha puesto en albergues o viviendas más permanentes.

“De hecho, lo que estamos tratando de hacer es asegurarnos de que las personas obtengan asistencia de alquiler para que puedan tener un apartamento real para vivir, especialmente las familias”, dijo Pritzker. “Es algo terrible y espero que haya una investigación completa lo más rápido posible, y si hay irregularidades, deberían rendir cuentas de inmediato”.

Como parte del presupuesto de $50.4 mil millones para el nuevo año fiscal, Pritzker y sus aliados demócratas en la Asamblea General de Illinois reservaron $42.5 millones para ayudar a los inmigrantes en todo el estado.

La difícil situación de los inmigrantes en la ciudad ha sido un foco de atención de la nueva administración de Johnson. En su mayoría de América Central y Venezuela, los migrantes han sido transportados en autobús a Chicago y otras ciudades importantes de EEUU desde Texas.

Mientras tanto, la ciudad ha luchado para encontrarles una vivienda adecuada. Desde abril, las 22 estaciones de distrito de CPD, junto con varios otros edificios municipales o sin uso, se han convertido en hogares temporales para cientos de migrantes, lo que a veces provoca la ira de los residentes locales.

Muchos de esos migrantes se han encontrado buscando refugio en las estaciones de policía de Chicago, ya que ha circulado información sobre las condiciones en los refugios de la ciudad. Funcionarios de la ciudad dijeron esta semana que más de 5,000 migrantes están siendo alojados actualmente en refugios de la ciudad y que casi 800 esperaban ser ubicados en estaciones de policía.

Los tres concejales del Distrito de Ogden emitieron un comunicado el viernes, diciendo que “si se corroboran estas acusaciones, tomaremos las medidas disciplinarias y legales apropiadas contra los oficiales involucrados”.

El viernes, los migrantes que se alojaban en la estación de Ogden dijeron que se enteraron por primera vez de las acusaciones cuando vieron las cámaras de los noticieros de televisión.

“Los oficiales ni siquiera nos hablan”, dijo David Hernández.

Dentro de la estación, su familia y algunos otros estaban detrás de barricadas policiales azules y rodeados por cinta amarilla de escena del crimen en las ventanas. La mayoría dormía en el suelo.

El representante estadounidense Jesús “Chuy” García dijo en un comunicado que la supuesta mala conducta era “inaceptable”.

“Nuestros vecinos inmigrantes vinieron a Chicago en busca de seguridad y estabilidad”, dijo García. “Los oficiales de policía juran proteger a nuestras comunidades, no participar en conductas sexuales ilegales con adolescentes y otras personas bajo su cuidado. Este supuesto comportamiento es completamente inaceptable. Espero que la investigación de la ciudad sea oportuna, exhaustiva, transparente y conduzca a la rendición de cuentas de todos los que sean declarados culpables”.

Ald. Michael Rodríguez, de 22 años, dijo que “las acusaciones de este tipo deben tomarse muy en serio y deben investigarse a fondo”.

“Somos una ciudad acogedora para los migrantes y debemos asegurarnos de que nuestros funcionarios públicos y espacios públicos rindan cuentas para honrar este valor”, dijo Rodríguez.

Karla Urbina, migrante de Nicaragua, estuvo más de un mes recluida en una comisaría de Chicago. Ella dijo que el abuso y la vergüenza de los oficiales era constante.

“Muchos no nos tienen respeto, nos ven como objetos”, dijo la madre, que no se hospeda en un albergue pero se ha unido a voluntarios para ayudar a otros solicitantes de asilo que están llegando en este momento.

Algunos oficiales tratan mal no solo a las mujeres, sino a todos los migrantes, dijo, insultándolos, mirándolos y violando la poca privacidad que puedan tener.

La mayoría no denunciará ningún abuso, incluso si es sexual, porque temen que los echen de las estaciones o del refugio, dijo.

“No podemos darnos el lujo de hacer eso”, dijo Urbina.

Susie Moya, una trabajadora social clínica licenciada y terapeuta de salud mental, inició un grupo de apoyo para mujeres migrantes. Dijo que muchas comparten un viaje traumático: historias de agresión sexual, pérdida de un ser querido y separación de familias, pero buscar ayuda no es fácil.

“Me estoy enfocando en ganarme su confianza”, dijo. La mayoría no ha tenido acceso a los servicios de salud mental y la apertura es difícil, agregó Moya.

“El trauma afecta psicológica y físicamente a estos solicitantes de asilo; ese trauma influye en su forma de pensar y en las decisiones que toman”, dijo Moya. “Es una pérdida general de poder y control, infundiendo miedo mientras intentan sobrevivir”.

Afuera del distrito de Ogden el viernes por la noche, un grupo de aproximadamente 30 activistas y políticos locales hablaron, sostuvieron carteles y cantaron en protesta.

“¡Los policías silenciosos son policías culpables! ¡Los policías silenciosos son policías culpables!”, era un mensaje.

“Muchas de ellas viajaron ocho países. Las golpearon, las robaron, las violaron. ¿Y lo hacemos de nuevo aquí? Es alucinante cómo permitieron que esto sucediera”, dijo Baltazar Enríquez, quien ha estado ayudando a las familias migrantes a través de su papel como presidente del Consejo Comunitario de La Villita.

Los manifestantes expresaron una variedad de demandas, incluida la publicación de los nombres del oficial o los oficiales bajo investigación, una acción rápida contra los oficiales, una reunión de emergencia con COPA y que Pritzker convoque una “sesión especial” sobre el tema.

Kiisha Smith, uno de los miembros del Consejo del Décimo Distrito de Policía, confirmó que la oficina del alcalde ya cumplió con una de sus demandas al pedir el retiro de todos los migrantes de la estación de policía del Décimo Distrito antes de las 4 p.m. del viernes. Su próximo destino no fue confirmado.

“Si se determina que alguna de las acusaciones es cierta y real, nos haremos cargo e intentaremos responsabilizarlos por sus acciones, definitivamente”, dijo Smith.

La concejala Monique Scott, quien representa al Distrito 24, que incluye la estación de policía del Distrito 10, dijo que los residentes deben esperar a que se resuelva la investigación.

“En este momento, son solo acusaciones. Entonces, mi corazón está con las personas involucradas y los oficiales porque no sabemos la validez de la verdad en este momento, ¿correcto? dijo en una llamada telefónica con el Tribune el viernes por la noche. “Animaría a cualquiera en mi barrio a sentarse y esperar y no sacar conclusiones precipitadas, no saltar a un lado, esperar los resultados y esperar a ver en qué resulta la investigación”.

-La reportera del Tribune Alice Yin contribuyó a este artículo.